El estado uruguayo subastó siete aviones de la malograda de Pluna. Los mismos quedaron en manos de la empresa española Cosmo, que ofertó US$ 137 millones por los Bombardier. El paso siguiente será encontrar una salida alas otras seis naves de la ex-Pluna.
Los aviones incluidos en la presente subasta fueron CX-CRA, CX-CRB, CX-CRC,
CX-CRD, CX-CRE, CX-CRF y CX-CRG.
El oferente europeo resultó ser un español de nombre Antonio Sánchez, quien maninesfó que representaba una empresa española llamada Cosmo Líneas Aéreas, la cual tiene su sede en Madrid y hace viajes a Lituania e Islandia con aviones Airbus A320/321. Acerca de un posible interés de radicarse en Uruguay, Sánchez respondió: "no tenemos base en Uruguay, nuestra base es en Europa". Ni BQB, ni Sol, ni Macair o la desprestigiada Conviasa aparecieron como interesadas en la subasta de Pluna.
Lo recaudado en la subasta se usará para el pago de una deuda de US$ 136,8 millones con el Scotia Bank, por la compra de los siete aviones de los cuales el Estado era garantía. Además de los US$ 137 millones, la compañía española debe abonar el equivalente al 0,05% más IVA por concepto de comisión de remate.