El día 17Mar69 un Boeing 727 de Faucett realizaba un vuelo regular entre Lima y Arequipa (CF213), comandado por el piloto Erich Klein, transportando 69 pasajeros. Minutos después del despegue desde el aeropuerto Jorge Chavez, un grupo de delincuentes penetró en la cabina portando pistolas y un cartucho de dinamita, dando la orden de cambiar el rumbo. Los sediciosos demandaron ser trasladados a Cuba. , capturando 69 pasajeros. A diferencia de otro hechos criminales del estilo, los protagonistas en esta ocasión conocían que la aeronave no poseía la autonomía necesaria para llegar directamente a La Habana, por lo tanto sugirieron a la tripulación hacer una escala técnica en Guayaquil. De esta manera el aparato realizó una escala en el aeropuerto Simón Bolívar.
Previamente a la llegada del aparato, las autoridades locales habían tomado conocimiento del secuestro del Boeing, el propio presidente de Ecuador, José María Velasco Ibarra, se hizo presente en la estación aérea, dando indicaciones de facilitar la partida de la aeronave. También se hallaban presentes funcionarios de la aviación civil y el jefe de la zona militar, coronel Marco Almeida Játiva, así como soldados del batallón de paracaidistas que procedieron a rodear la nave. La prensa no tardó en hacerse presente. Uno de los delincuentes, una vez que el aparato permanecía en la loza del aeropuerto ecuatoriano se asomó por la ventana de a cabina del avión, mostrando un paquete de dinamita, llegando a gritar: "Retírense o volaremos el avión", Veinte minutos después dé la llegada del avión, los secuestradores accedieron a las súplicas de las mujeres que viajaban en el aparato para que pudieran bajar ellas con sus hijos, haciendo lo propio tres sacerdotes, y después el resto del pasaje. Una vez reabastecida de combustible, la aeronave estuvo lista para reemprender el viaje de inmediato. Por entonces trascendió que los secuestradores utilizaron seudónimos para embarcarse en el vuelo de Faucett, a saber: Carlos Rodríguez; Jorge Alcazar; Pedro Estuardo y Julio Noboa. Una vez que el avión peruano sobrevoló espacio aéreo cubano el 727 fue flanqueado por una máquina de la Fuerza Aérea Revolucionaria, que acompañó al jet peruano hasta su descenso.
La tripulación informó a su regreso que los delincuentes fueron desarmados ni bien llegaron a Cuba, siendo transportados en automóviles que se acercaron a la pista. El aparato quedó en el aeropuerto Rancho Boyeros, por cinco horas, siendo liberado merced a la gestión del embajador de México en Cuba, y tras el pago de los derechos de aterrizaje y combustibles, que ascendieron a 1.283 dólares. Acto seguido emprendió vuelo de regreso con destino a Guayaquil para transportar a los pasajeros que habían quedado en la terminal aérea. - Ver De Faucett a Hollywood.
Detalle de la aeronave* cn. 19846/555 Boeing 727-63 - ff. 26Mar68 - Boeing Company; Ghana Airways ntu.; OB-R-902 - Faucett Perú 09Abr68; N32720 - Boeing Company 18May85; N32720- General Electric Credit Corporation li. Ago85; N32720 - Boeing Company 25Feb87 - Utilidado para como plataforma del proyecto UDF con plantas de poder G&E. Retornó siendo almacenado en Mojave Oct89 - Desmantelado en 1991.